El pueblo pápago, acostumbrado a poder acceder libremente a sus tierras, ahora sufre una vigilancia constante, e incluso a veces son detenidos por el simple hecho de atravesar su territorio legal. El pueblo pápago, que otrora fue una sola nación unificada, se ha visto obligado a dividirse en cuatro tribus separadas política y geográficamente por culpa de una valla.